Recetas que maridan bien con Vino blanco Sauternes
Recetas que maridan genial con este tipo de vino:
Velvet crisp
- 1h 20m
- 4
- media
Encanto cítrico
- 50m
- 16
- fácil
Sueño espresso
- 2h 30m
- 8
- media
¿Cómo es un Sauternes?
El Sauternes es un vino francés excepcionalmente especial, que proviene de la región de Burdeos. Es un vino blanco dulce, pero no dejes que esa sencilla descripción te engañe; el Sauternes es rico, complejo y verdaderamente único en su carácter.
Este vino se elabora principalmente con las uvas Sémillon, Sauvignon Blanc y Muscadelle, pero la verdadera magia del Sauternes radica en su proceso de elaboración. Las uvas son atacadas por la «Botrytis cinerea», también conocida como «podredumbre noble». Esto suena menos apetecible, pero en realidad es lo que hace al Sauternes tan distintivo. La podredumbre noble deshidrata las uvas, concentrando los azúcares y ácidos en una deliciosa simbiosis que da como resultado un vino de gran profundidad y complejidad.
El Sauternes es de color dorado y despliega aromas de melocotón maduro, albaricoque, miel, nueces y a menudo un toque cítrico. En boca, es untuoso, dulce pero equilibrado con una acidez refrescante que evita que sea empalagoso. Los sabores son intensos y persistentes, con un final largo que puede durar varios minutos.
Aunque los vinos dulces a menudo se consideran vinos de postre, el Sauternes es sorprendentemente versátil en cuanto a maridaje con alimentos.
Postres: Por supuesto, su dulzura y su riqueza armonizan maravillosamente con una variedad de postres. Prueba a combinarlo con tarta de manzana o pera, crème brûlée o incluso un pastel de queso con un toque de limón.
Quesos azules: Un clásico maridaje francés es el Sauternes con queso Roquefort. La dulzura del vino se contrapone de manera excepcional a la salinidad y la picante del queso azul.
Foie gras: Otro maridaje tradicional es con foie gras. El contraste entre el dulzor y la acidez del vino con la riqueza y sabor del foie gras es simplemente exquisito.
Cocina asiática: Su dulzura y acidez también lo hacen un buen acompañante para platos asiáticos con un toque de dulzor o especias, como un pato a la naranja o platos tailandeses ligeramente picantes.
En resumen, el Sauternes es un vino que merece ser explorado. Ya sea como acompañante de una cena íntima, para realzar una celebración especial o simplemente para disfrutar de su singularidad, no hay duda de que este vino siempre dejará una impresión duradera.